Obstrucción de vía lagrimal
La obstrucción de vía lagrimal puede producirse tanto en adultos como en niños, se presenta cuando existe una dificultad en el drenaje por una bloqueo parcial o total de la vía en distintos niveles.
Cuando la obstrucción se encuentra antes del saco se denominan presacular y posterior al saco postsacular. Ambas causan acumulación de lágrimas en la superficie ocular y lagrimeo ocasional o constante.
Cuando los conductos lagrimales se bloquean, las bacterias atrapadas en el saco lagrimal pueden producir una infección llamada dacriocistitis. Los síntomas de la infección incluyen:
• Inflamación, dolor y enrojecimiento de la esquina interior del ojo, o alrededor del ojo y la nariz.
• Infecciones recurrentes en el ojo.
• Descargas de mucosa en el ojo.
• Secreción amarillo-verdosa en el ojo.
• Costras (legañas) en las pestañas.
• Visión borrosa.
• Fiebre.
El tratamiento de la obstrucción lacrimonasal para corregir la epífora es mediante la cirugía de vías lagrimales.
Las cirugías empleadas incluyen desde técnicas sencillas como la intubación o colocación de stents en la vía lagrimal, hasta la dacriocistorrinostomia externa.